sumergido día a día en aguas lentas fluctuando sin saber las direcciones despacio con un rumor de pasos que cuelgan de la noche ojos de un niño triste a modo de farolas despacio con el peso excesivo que agobia en lo profundo y que no tiene peso hasta que olvido el mundo de los tontos despacio en la línea abrasiva de este tiempo que corroe la piel mientras va desgastando las palabras más lento en la constelación de vidrios rotos que parpadean soles de hojalata estoy a un solo paso de lograrlo y un paso a veces tiene el color de lo innombrable o dura lo que duran tus besos infinitos a un paso nada más de conseguirlo en esto estoy pero despacio sin apuro dentro
no era tan difícil no lo era además cualquiera sabe que a las vacas no les gustan los poemas y aullar de madrugada no es tan divertido como cuando puteábamos la rabia al mediodía por otra parte quién va a ser el amigo que te reemplace el culo después que algún imbécil te lo jodió a patadas no era tan difícil pisar el embrión cuando aún gestaba el odio su veneno y el perro del fascista está adiestrado para arrancar tus piernas antes que puedas dar un nuevo salto era cuestión de hacer lo que predicas ni bien te diste cuenta lo tonto que es regar en el desierto ya no es tan divertido como empinar un mástil sin bandera como un ateo hablándole a los ángeles como correr tú solo una carrera donde por más que corras vas a llegar segundo y ya me harté de ver nuestras derrotas con el consuelo de "la frente en alto" de los mismos finales repetidos de ver las rebeldías a destiempo y tanta dignidad desperdiciada porque estuviste ciego para el antes porque creíste que algo cambiaría porque tu ingenuidad bien se merece que te pateen el culo para siempre
si al menos tus páginas contaran que existen otros libros y si la puerta fuera entrada hacia otras puertas acaso ya no habría motivos para odiarnos
guardo respeto al viento por más que se solace cambiando cada día de dirección sus pasos pues sigue siendo el mismo en sus contradicciones
y acaso no me aburro yo mismo y busco el cambio después de repetir por cuarta o quinta vez que me repito
y qué es lo diferente sino la innumerable variable de las búsquedas
si al menos tu cabeza comprendiera que otra cabeza apunta su proa hacia otros puertos y que seguramente no llegará más lejos que al sitio donde espera otra pregunta sabrías que la grieta no es tan honda porque lograste ver el puente y no el abismo
no sé sólo imagino las formas más sencillas del respeto aunque posiblemente esté diciendo algo equivocado por cierto es el margen de error que me concedo a cada vez que escribo estos engendros y tienes el derecho de ignorarme
vino entonces el payaso razonable no trabajas dijo no eres productivo ni eres digno deberías replantear tu posición frente a la vida ya sabes en el circo serías bienvenido y vino el presidente con cara de culo no estás contribuyendo no pagas tus impuestos nos la pones difícil compañero y si toda esa gente pensara como tú a quién gobernaríamos después vino a aburrirme el sacerdote con el sermón de siempre
es que me vio sin dios y se apiadaba de mi existencia absurda menguando en la tiniebla del pecado a nadie respondí nunca he confiado mucho en las palabras por eso cuando el niño vino a verme y todos los demás argumentaban justificando su mundo de mierda sentí que estaba haciendo lo correcto tan solo por un guiño de sus ojos
cierto cansancio oscuro decenas de alfileres clavados en mis párpados alzándolos forzándome a mirar el mecanismo los animales ciegos y grises como piedras estériles de todo pensamiento cierto cansancio de ver un funeral en cada rostro los cirios derritiéndose impacientes el tiempo como un pez fuera del agua boqueando agonizando sin aire sin sentido y charcos de aguas muertas que repelen la forma del reflejo y la resaca ambigua de quienes desollados olvidan en la noche su calvario palabras con los verbos atrofiados un bosque de concreto con cadalsos y árboles que inclinan la estatura de acuerdo al peso muerto del ahorcado cierta insanía en traje de payaso que activa la sonrisa de un imbécil la ciudad abre grifos con la droga precisa y después lentamente
entreabre las piernas la vieja dictadura del sol de un dios idiota chorrea latigazos de oro sobre el muelle parece que violaran a una virgen sombría y la noche que fue acueducto de esperma derramado en un cáliz mariposa marrón oquedad en el vientre se disfraza de nuevo con las mismas mentiras
nada tienes que pueda ni comprarme ni herirme soy un blanco difícil para el odio del odio sin embargo desnudo sin pistola ni escudo sin el miedo que escupe sus inmundos reptiles voy a ti desatado de la soga invisible que proponen los dioses de este reino mediocre y te cuento que puedes caminar a mi lado y que no necesitas descreer mi palabra porque yo no ambiciono dirigirte los pasos y en las pausas de noches que me besan el alma soy capaz de soñar un lugar para todos y en los puentes que tiendo pronunciando el abrazo voy limpiando mis ojos nada tienes que pueda ni comprarme ni herirme porque ya pagué el precio de mi propio destierro y aunque no lo parezca nuestra búsqueda es sed que ilumina el paisaje a pesar de doctrinas y de libros sagrados a pesar del estruendo de las voces gritando a pesar de banderas y decretos y estatuas nuestra sed es la misma y ella apenas difiere en la ruta escogida por llegar al oasis
Cuando ya nada se espera personalmente exaltante, mas se palpita y se sigue más acá de la conciencia, fieramente existiendo, ciegamente afirmando, como un pulso que golpea las tinieblas,
cuando se miran de frente los vertiginosos ojos claros de la muerte, se dicen las verdades: las bárbaras, terribles, amorosas crueldades.
Se dicen los poemas que ensanchan los pulmones de cuantos, asfixiados, piden ser, piden ritmo, piden ley para aquello que sienten excesivo.
Con la velocidad del instinto, con el rayo del prodigio, como mágica evidencia, lo real se nos convierte en lo idéntico a sí mismo.
Poesía para el pobre, poesía necesaria como el pan de cada día, como el aire que exigimos trece veces por minuto, para ser y en tanto somos dar un sí que glorifica.
Porque vivimos a golpes, porque apenas si nos dejan decir que somos quien somos, nuestros cantares no pueden ser sin pecado un adorno. Estamos tocando el fondo.
Maldigo la poesía concebida como un lujo cultural por los neutrales que, lavándose las manos, se desentienden y evaden. Maldigo la poesía de quien no toma partido hasta mancharse.
Hago mías las faltas. Siento en mí a cuantos sufren y canto respirando. Canto, y canto, y cantando más allá de mis penas personales, me ensancho.
Quisiera daros vida, provocar nuevos actos, y calculo por eso con técnica, qué puedo. Me siento un ingeniero del verso y un obrero que trabaja con otros a España en sus aceros.
Tal es mi poesía: poesía-herramienta a la vez que latido de lo unánime y ciego. Tal es, arma cargada de futuro expansivo con que te apunto al pecho.
No es una poesía gota a gota pensada. No es un bello producto. No es un fruto perfecto. Es algo como el aire que todos respiramos y es el canto que espacia cuanto dentro llevamos.
Son palabras que todos repetimos sintiendo como nuestras, y vuelan. Son más que lo mentado. Son lo más necesario: lo que no tiene nombre. Son gritos en el cielo, y en la tierra son actos.
ahora cuando sientas tan cerca las paredes y el aire sea un intento fragmentado y brillen los vapores de la sal escribirás un verso para nadie aún te va a quedar algo de noche para asumir los pliegues de la muerte y un territorio seco donde lo que has de dar se te devuelve en fríos materiales ahora cuando sientas que la escalera lleva a ningún sitio por fin entenderás que siempre queda el salto hacia el vacío y a veces es mejor que detenerse cuando se terminaron los peldaños y a veces es mejor que las esperas de un emisario idiota que pintará una puerta hacia lo mismo
será que hay un motivo absurdo en el aullido del perro que mirás bajo la lluvia
tal vez sabe de sobra los lugares donde van a volarle la cabeza
quizás tiene un gatillo en el instinto a fuerza de escapar de las golpizas y apenas ambiciona un gris de cielo espeso ahorcado en la penúltima botella en donde va a beberse las miserias lo veo hurgar nervioso en la basura buscando algo que sacie por unos días más su inexistencia lo veo tan cercano que el llanto se me cae de la mirada me agrede me avergüenza me arrastra con el alma detrás de algún crepúsculo con trapos detrás del estertor de su gruñido a un callejón en ruinas donde tu dios no puso su negocio donde no llega el sol ni la esperanza ni rastros de una efímera botella con dos dedos de alcohol como anestesia
y no hay lugar entonces para el sueño y no hay ni una ventana y no se admiten perros y ni siquiera existe -puta madre- un gris de cielo espeso para beber de un trago la tristeza
nadar un mar de aguas subterráneas temblar entre humedades que drenan dulcemente de las grietas caer en los abismos de la lluvia involucrar la piel hasta volverla carne transparente beberse gota a gota las entrañas ahogarse en la saliva de tu boca
el sistema no admite sus errores bautiza delincuentes a los inadaptados arroja lo que sobra en una cárcel para ocultar su propia podredumbre la cárcel la basura depósito de carne desechable como un pozo sin fondo en donde sepultar la porquería hay una voz que nunca has escuchado como un puñal clavado en tu conciencia agacha la cabeza y obedece o te reciclaremos en la sagrada iglesia del residuo la biblia nunca escrita de las bestias acólitos de un dios de papel verde desde que decretaron que todo en este mundo tiene un precio y no sabemos qué pero esperamos que ocurra algún milagro que nos salve en tanto te ofrecen el derecho de ser larva por tiempo indefinido con esa libertad que menoscaban las cárceles del miedo ***** por la televisión el nuevo presidente gesticula de acuerdo a los impulsos de los hilos el monstruo del poder que sabe bien la forma de engañarte pintó por esta vez de color negro la puta marioneta sólo para que sigas esperando así como esperaron tus ancestros temblando en una jaula comiendo la resaca del vacío
no vas a darte cuenta que te miro cuando tu claridad busca escaparse del silencio no vas a sospechar las lágrimas que escribo con los ojos y que desaparecen cuando me necesitas cuando tu adolescencia refresca un mundo enfermo y me renueva el beso así sin proponértelo con argumentos sólidos que emergen desde toda tu dulzura no vas a darte cuenta que pregunto que voy interrogándome los días sin tregua ni piedad porque no tengo claro si fueron suficientes los espacios si tuve lucidez para animarte las alas que exigían un cielo para ser y desplegarse y cuánto hubo de error en lo que dije y qué guardas de mi y qué olvidaste y todas las palabras omitidas y esto de improvisar y comprenderte no sé que he hecho bien a veces sólo veo los errores a veces hay un mundo de conflictos que acusan mi alegría y no tengo refugio ni defensa mas cuando la tristeza te amuralle el limpio corazón y la sonrisa parezca agonizar en los encierros sé que rebuscarás en mis palabras hasta encontrar la luz de las ventanas
cuando me juzgas te juzgas y olvidas preguntarme qué pretendo
hay demasiados dioses en el mundo demasiada vanidad y muchos ciegos y si algo está sobrando es el orgullo y si algo está faltando es tan pequeño que ya no podrás verlo excepto si desciendes de tu altura
qué puede sugerirte un pobre diablo que tú no hayas pensado de antemano
olvido que eres sabio como el resto y al mando del timón no cabe duda habrás de conducirme al paraíso
por eso y poco más he decidido apearme de la nave dejar atrás un rumbo que no entiendo y sin saber nadar voy convencidoen dirección contraria a lo sensato
Um velho cruza a soleira De botas longas, de barbas longas, de ouro o brilho do seu colar Na laje fria onde coarava sua camisa e seu alforje de caçador Oh meu velho e invisível Avôhai Oh meu velho e indivisível Avôhai Neblina turva e brilhante em meu cérebro, coágulos de sol Amanita matutina e que transparente cortina ao meu redor Se eu disser que é meio sabido você diz que é meio pior É pior do que planeta quando perde o girassol É o terço de brilhante nos dedos de minha avó E nunca mais eu tive medo da porteira Nem também da companheira que nunca dormia só
Avôhai Avô e pai Avôhai
O brejo cruza a poeira De fato existe um tom mais leve na palidez desse pessoal Pares de olhos tão profundos que amargam as pessoas que fitar Mas que bebem sua vida sua alma na altura que mandar São os olhos, são as asas, cabelos de Avôhai Na pedra de turmalina e no terreiro da usina eu me criei Voava de madrugada e na cratera condenada eu me calei Se eu calei foi de tristeza, você cala por calar E calado vai ficando só fala quando eu mandar Rebuscando a consciência com medo de viajar Até o meio da cabeça do cometa Girando a carrapeta no jogo de improvisar Entrecortando eu sigo dentro a linha reta Eu tenho a palavra certa pra doutor não reclamar
Avôhai, Avôhai, Avôhai
AVOHAI
Un viejo atraviesa el umbral
De botas largas, de barbas largas, de oro el brillo de su collar
Hacia el frío patio donde colgaba su camisa y su alforja de cazador
Oh mi viejo e invisible Avohai
Oh mi viejo e indivisible Avohai
Neblina turbia y brillante en mi cerebro, coágulos de sol
Amanita matutina y transparente cortina a mi alrededor
Si yo digo saber el modo, usted me dice que es el peor modo
Es peor que el planeta cuando pierde el girasol
Es el rosario de brillantes en los dedos de mi abuela
Y nunca más tuve miedo de la puerta
Ni tampoco del compañero que nunca dormía solo.
Avohai
Abuelo y padre
Avohai
El pantano atraviesa la polvareda
De hecho existe un tono más leve en la palidez de ese personal
Par de ojos tan profundos que amargan a las personas que observan
Sin embargo beben su vida, su alma a la altura debida
Son los ojos, son las alas, cabellos de Avohai
La piedra de turmalina y en el patio de la usina me crié
Volaba en la madrugada cuando en un cráter condenado enmudecí.
Si yo callé fue de tristeza, usted calla por callar
Y callado se va a quedar hasta que yo le ordene hablar.
Rebuscando en la conciencia, con miedo de viajar
Hasta el medio de la cabeza del cometa
Girando el trompo en el juego de improvisar
Entrecortado sigo dentro de una línea recta
Tengo la palabra justa para que el doctor no venga a reclamar
permíteme nacer aún puedo remediar un par de versos y poco importará si me comprendes la forma no será nunca la misma y el miedo es un obstáculo que aleja si olvidas que desdeño los cerrojos qué harás con tu silueta después de maldecirme la confianza yo permití que entraras en mi casa y no para juzgar el pan y el vino permíteme nacer con todos mis errores y carencias con las pequeñas alas mutiladas con la palabra gris que no pronuncio por impedir la grieta salgamos cuanto antes del templo del gran dios espantapájaros con sus estatuas ciegas que se jactan de mirar lo que difiere permíteme nacer cuando tú nazcas abrazados en el medio de algún puente
mira así es como sucede y nuestra embarcación que zozobraba retoma a duras penas la ignota travesía regresa al borde mismo del naufragio y un viento inesperado la rescata así es como sucede y en esa sucesión nos desgastamos aún sin pretenderlo la piel se nos corroe y se nos caen los sueños del bolsillo y se nos cae el pelo y la esperanza producto como somos de días al azar de ilógicos designios y una ambiciosa danza tan breve como intensa por eso y mucho más puedo explicarte las cifras que corrompen los ciegos materiales de un dios que se recicla la mezquindad pintada con sonrisas y todo ese residuo de un mundo alimentado en artificio que come la basura que vomita así es como sucede y si algo de valioso existe en este cuento me lo fuiste enseñando en la ternura de ser sencillamente cuanto eres la clara referencia de mi afecto la casa en donde esperan los abrazos el agua cuando vuelvo del desierto