viernes, 7 de agosto de 2009

Un Cuadro

cuando vinieron a dar la extremaunción
yo andaba loco
pintando ventanales
y ellos no vieron más que el infructuoso
reptil
de lo carente
y la inutilidad del sortilegio
porque se limitaban a este cuerpo
a estos ojos
a esta misma desventura
que no era ni el perfume de mis alas
sino el invento cruel de sus espejos

y no me interesó desenredarlos
los dejé viejos
detrás de sus leyendas
y con la algarabía
colgando
como trapo
babeando las palabras
sobre insignificantes calaveras

el tiempo lo perdí con mis pinceles
hasta que atravesé la transparencia