lunes, 11 de febrero de 2019

estoy consustanciado con la oscura embarcación

el puerto es aleatorio

hay gentes esperando alguna buena historia
promesas rescatadas de la sal
anuncios de gaviota
mojadas esperanzas valederas
venidas desde el fondo de la nada

el mar no tiene tiempo para huellas
mira pasar de nuevo mi barquito
mira mi cargamento en la bodega
se guarda en lo profundo cada juicio
y a poco de pasar ya se le olvida

no suelo hacerme grandes ilusiones
eso aprendí del ritmo de las olas

pero es éste mi deber de navegante
contar un cuento azul en los desiertos
aunque después de un tiempo con variables
la sed vuelva a ganarme la partida

qué extraña esta alegría que me invade
sabiendo que es vano cada verso

sentí en mi propia carne la emoción
de aquella bienvenida
pero soy yo quien cuenta las historias
y sé cómo terminan