si ya clavé mis dientes en la fiera no quieras asustarme con payasos no hay nada que cuidar me siento libre el tiempo de mirar en mis agujeros fue tiempo malgastado el tiempo de entenderme se atomiza ya no quiero saber ni disculparme no me perturba el hecho de estar ciego porque me sobra luz en los sentidos no quiero corregir me gustan los deslices de mi alma me gusta no encajar en las casillas cambiar de dirección romper el vidrio y amanecer en medio de la noche no quieras asumirme ni cuidarme los barcos que partieron si regresan nunca traerán los mismos tripulantes y mi cabeza advierte su universo como un faro distante que me guía pues cuanto soy es todo este segundo sin nada que explicar sin atenuantes con los brazos abiertos a la vida con la emoción temblando entre los labios
a uno y otro lado del pasillo las manos como humo los ojos con espinas dolor de ser tan poco mientras sube el insufrible aliento de la peste olor a miedo y ropa desgastada cadáveres de tiempos en desuso a uno y otro lado la penumbra la sed de sed el agua evaporada demasiado dolor para emprender el viaje y tanta la miseria que se nace desde la carne yerta y un asqueroso ruido en la garganta como de flor carnívora como de un animal agazapado dispuesto a dar el salto del suicidio se vierte en la tinaja el mismo llanto como si el llanto fuera a repetirse y cuando te das cuenta siempre es tarde el agua más que agua es gelatina y a uno y otro lado se te estanca esa silueta absurda en el pasillo los trapos que le inventan un paisaje la luz que recupera un cuentagotas las ganas de dormirse para siempre
nada hay de original en lo que escribo lo sé repito el verbo que otros inventaron y me constan los plagios flagrantes que perpetro a veces a sabiendas y otras zigzagueando yo le robé mil versos a neruda desmantelé a walt whitman entré como un ladrón desvergonzado en los poemas de león felipe sustraje la vocal orfebrería de góngora y quevedo sin el consentimiento del maestro y no tuve reparos en componer con restos de aquél perito en lunas nacido en orihuela llené los anaqueles de palabras ajenas colgué de las paredes poesías como pájaros a los que abrí su jaula y les cambié el plumaje y con total cinismo me disfracé con ropa que no me pertenece no hay nada original y me repito apenas soy el aspa que bate el contenido y engendra el mismo son con otro aspecto así que voy andando con mi botín a cuestas y pinto garabatos de métrica sinuosa sin olvidar jamás de quienes me alimento sin olvidar jamás mi deber transparente mi corazón de hombre que va tras sus verdades y esta necesidad urgente e imperiosa de ser antes que nada auténtico y sincero
Sube a nacer conmigo, hermano. Dame la mano desde la profunda zona de tu dolor diseminado. No volverás del fondo de las rocas. No volverás del tiempo subterráneo. No volverá tu voz endurecida. No volverán tus ojos taladrados. Mírame desde el fondo de la tierra, labrador, tejedor, pastor callado: domador de guanacos tutelares: albañil del andamio desafiado: aguador de las lágrimas andinas: joyero de los dedos machacados: agricultor temblando en la semilla: alfarero en tu greda derramado: traed a la copa de esta nueva vida vuestros viejos dolores enterrados. Mostradme vuestra sangre y vuestro surco, decidme: aquí fui castigado, porque la joya no brilló o la tierra no entregó a tiempo la piedra o el grano: señaladme la piedra en que caísteis y la madera en que os crucificaron, encendedme los viejos pedernales, las viejas lámparas, los látigos pegados a través de los siglos en las llagas y las hachas de brillo ensangrentado. Yo vengo a hablar por vuestra boca muerta.
A través de la tierra juntad todos los silenciosos labios derramados y desde el fondo habladme toda esta larga noche como si yo estuviera con vosotros anclado, contadme todo, cadena a cadena, eslabón a eslabón, y paso a paso, afilad los cuchillos que guardasteis, ponedlos en mi pecho y en mi mano, como un río de rayos amarillos, como un río de tigres enterrados, y dejadme llorar, horas, días, años, edades ciegas, siglos estelares.
Dadme el silencio, el agua, la esperanza.
Dadme la lucha, el hierro, los volcanes.
Apegadme los cuerpos como imanes.
Acudid a mis venas y a mi boca.
Hablad por mis palabras y mi sangre.
(Extraído de "Alturas de Macchu Picchu", de Pablo Neruda)
sabemos de antemano que nadie va a ayudarnos y que sólo la sombra se nutre en el silencio vestir estos andrajos que nos venden por ropa llegar a una estación en donde nadie espera la soledad gotea transcurre en el delgado pasadizo aceite color sombra golpea puerta a puerta divide en dos mitades de humo la conciencia se torna pegajosa se enfría menoscaba no olvidarás tu nombre cuando nos enumeren no el nombre que te dieron hablo de lo que sabes el miedo no posee las vísperas del beso pero sabe de calles que van a confundirte tú y nosotros deshechos por soledad y sombra juntaremos las manos para encender la lluvia así será el calvario de todos los inviernos algún puerto sombrío los estrechos confines y esas embarcaciones que no habrán de llevarte a gritar por tu vida bajo un cielo nublado en tanto haya un instante de sol que nos permita morder la identidad de lo profundo en tanto la conciencia persista una ventana en tanto no te aislen del abrazo mientras el miedo llueve sus pájaros en días moribundos
por dentro de otra noche tan cerca de dormir o despertarme giran el mal y el bien y poco sé desde que tengo frío desfallecer es una trampa para seguir jugando veo en el corredor los cuadros repitiendo las mentiras veo quien va fingiendo quien traicionó al espejo después de asesinar lo que era cierto detrás de la pared un par de ojos de niño abren los labios rotos de las sombras con un color de filo de cuchillo hoy tengo dos motivos para odiarte pero olvidé el révolver cuando cerré la puerta de tu casa
quizás solo se trate de saber que no hay nada por saber sino otra esquina las mismas marionetas veneno y aserrín noche tras noche un par de espejos rotos un grifo que gotea imbécil persistencia tan cruel como este tajo abierto a tientas por buscar en la sangre una supuesta luz poco probable y releer tus ojos en mis tristes espejos y suplicarte un gesto para reconciliarme
y mientras recontábamos los restos mientras inventariábamos la luz que aún latía bajo la ceniza nos hemos dado tiempo suficiente para mirar al mar multiplicar su abrazo interminable aunque la noche arraiga sombra y miedo aunque se trague con su enredadera el pequeño corazón que nos defiende y trepe erosionando el territorio nos hemos dado tiempo para entender el ritmo de las olas y amanecer es más que abrir los ojos y despertar es más que estar con vida será que poco a poco comprendimos será que tanta noche no era adversidad sino terreno en donde enraizamos el dolor y florecimos
Hello, Is there anybody in there? Just nod if you can hear me Is there anyone at home?
Come on now I hear you're feeling down I can ease your pain And get you on your feet again
Relax I'll need some information first Just the basic facts Can you show me where it hurts
There is no pain, you are receding A distant ship's smoke on the horizon You are only coming through in waves Your lips move but I can't hear what you're saying When I was a child I had a fever My hands felt just like two balloons Now I've got that feeling once again I can't explain, you would not understand This is not how I am I have become comfortably numb
O.K. Just a little pin prick There'll be no more aaaaaaaah! But you may feel a little sick Can you stand up? I do belive it's working, good That'll keep you going, through the show Come on it's time to go.
There is no pain you are receding A distant ship's smoke on, the horizon You are only coming through in waves Your lips move, but I can't hear what you're saying When I was a child I caught a fleeting glimpse Out of the corner of my eye I turned to look but it was gone I cannot put my finger on it now The child is grown The dream is gone And I have become Confortably numb.
CONFORTABLEMENTE ENTUMECIDO
Hola
¿Hay alguien allí adentro?
Solo cabecea si puedes oírme.
¿Hay alguien en casa?
Vamos, ahora.
He escuchado que te sientes mal.
Bueno, yo puedo aminorar tu dolor,
Ponerte en pie de nuevo.
Relájate.
Necesito algo de información, primero.
Solo los hechos básicos,
¿Puedes mostrarme donde te duele?
No hay dolor, tú estás retrocediendo.
El humo de un barco lejano en el horizonte.
Estás viniendo solamente en oleadas.
Tus labios se mueven pero no puedo oír lo que estás diciendo.
Cuando yo era niño tuve fiebre.
Sentía mis manos como dos globos.
Ahora tengo esa sensación de nuevo.
No puedo explicar, no lo entenderías.
Así no es como soy yo.
Estoy confortablemente entumecido.
O.K.
Apenas un pequeño pinchazo.
Y no habrá más… ¡Aaaaaaaahhhhh!
Pero puedes sentirte un poco enfermo.
¿Puedes pararte?
Creo que está trabajando. Bien.
Eso te mantendrá funcionando para el show.
Vamos, es hora de irse.
No hay dolor, tú estás retrocediendo.
El humo de un barco lejano en el horizonte.
Estás viniendo solamente en oleadas.
Tus labios se mueven pero no puedo oír lo que estás diciendo.
Cuando yo era niño tuve una efímera visión,
Por el rabillo del ojo.
Di vuelta para ver pero se había ido.
Ahora no puedo poner mi dedo sobre él.
El niño ha crecido,
El sueño se ha ido.
Estoy confortablemente entumecido.
ni la más leve huella de dios en las cornisas apenas un sinuoso escalofrío la invitación con luces de artificio a rescatar lo que nunca perdiste y tu razón marchando a contramano y tu pequeña guerra sin soldados sin nadie a quien matar sin vencedores cortando la maraña con los dientes durmiendo entre las ruinas del vacío hiriéndote la piel con las espinas tú no querías esto te obligaron y renunciar a ti garantizaba la paz que te vendía el mercader pero aprendiste el juego del idiota para poder sortear el laberinto y reencontrar al niño de tu alma allí donde escondido te esperaba allí donde la luz amanecía profundidad de océanos y cielos un prisma en los rincones de la carne fluctuar de llama roja en las paredes un pájaro ceniza que se vuela de navegar un tramo de intemperie modificando el viento con las manos hasta la luz más tuya tuvo un precio pero llegar allí fue la celebración de tu certeza
allídejarse estar beber las claridades flotar como una rama sobre el agua sin peso sin por qué quedarse quieto sentirse atomizado entre la espuma verter más luz aún en el sosiego perderse sin remedio en los espejos fragmento de infinito que desangra quietud tranquilidad cabeza ingrávida flotando paz adentro del milagro y cada cicatriz tuvo sentido y cada atardecer valió la pena
hoy que todo se empeña en ser principio odio a este imbécil corazón que no percibe más que su maquinaria intransigente más que su persistencia en el desgaste