por dentro de otra noche
tan cerca de dormir
o despertarme
giran el mal y el bien
y poco sé desde que tengo frío
desfallecer es una trampa
para seguir jugando
veo en el corredor
los cuadros repitiendo las mentiras
veo quien va fingiendo
quien traicionó al espejo
después de asesinar lo que era cierto
detrás de la pared
un par de ojos de niño
abren los labios rotos de las sombras
con un color de filo de cuchillo
hoy tengo dos motivos para odiarte
pero olvidé el révolver
cuando cerré la puerta de tu casa