viernes, 9 de enero de 2009

¡Bon Appétite!

hay que domesticar algunos ojos
hay que inyectar invierno en las raíces
una pizca de duda en las verdades
verter
edulcorante
en el periódico

hay que ayudar al sol moliendo selvas
rociar de alcohol barato los olvidos
batir
pisar
trozar
la rebeldía
untar las ambiciones con ceniza

hacer una ensalada de payasos
cernir el latigazo y la barbarie
espolvorear la luz con polvo blanco
idiotizar
sin prisa
a los borregos

mezclar siempre en el mismo recipiente
iguales cantidades de poetas
políticos
pedófilos
psicólogos
leprosos
travestis
sacerdotes
adictos
millonarios
ateos
policías
hervir a fuego lento la inocencia
condimentar el aire con veneno
cuidar de la cocción con más soldados

y como cada cual se ha involucrado
en la elaboración de la receta
el gran festín del hombre nos abarca
y nadie podrá ser discriminado

así que no se admiten las excusas

la mesa está servida para todos

es hora de comer

sirvan la mierda