a veces
lo presiento
aunque no sepa bien cómo ni cuándo
entonces
por si acaso
activo las membranas del instinto
sucede que no soy un matemático
los números me asustan
y nunca entenderé
esa bendita ley
de las probabilidades
hoy es hoy con el peso de lo que fueron antes
aquellos que hice míos
no voy a pretender que tus raíces se sacien en mi río
si el agua que te ofrezco no es la que esperabas
por eso
se me ocurre
dejar el cauce limpio y despejado
por si algún día piensas en la orilla
en donde te esperé cuando era nadie
es lo que puedo darte
apenas un refugio en donde descansar de tus fatigas
apenas un remanso
para empezar de nuevo
y la mano extendida de quien tanto te quiere
para que en tus naufragios
ya no te sientas sola
entonces
cuando por el desierto
allá
desde muy lejos
distingas la bandera
esa bandera azul que tu me regalaste
esa bandera azul que tu me regalaste
sabrás
por tu sonrisa
que estás muy cerca de llegar a casa